Un sargento "alcoholizado" me dio una Biblia...
ADRIS, Carlos Mario, Clase 1963.
Cuando me incorporaron, el año 1983, mi destino fue el Batallón de
Ingenieros 9 Zapadores de Río Mayo, Chubut, era el único testigo de Jehová,
incluso me llevaron al campo de vivac.
Estando en la enfermería del campo llegó la fecha de la conmemoración y me
angustiaba no poder estar con los hermanos, veía la luna llena entre las
montañas y le oraba a Jehová porque ni siquiera podía tener una Biblia.
En eso entró un Sargento totalmente ebrio que pretendía que lo saludara “mi
sargento”, al no acceder y tratar de explicarle mi postura, sacó furioso de
su bolsillo una Biblia chiquita, esa de los gedeones y me increpó diciendo
que allí decía que debía obedecer a las autoridades. Me la dió y se fue como
pudo tambaleándose.
Así que esa noche pude leer el relato de la última cena y le agradecí a
Jehová por su regalo.
Meses mas tarde el Sargento vino a reclamarme la Biblia.